martes, enero 3

No puedo ...


¡Tantas veces te digo adiós … este es el final … hasta aquí llegué!

Y antes de que pueda ponerlo en práctica … tu presencia se vuelve tan firme y …

¡Ahí va de nuevo la burra al trigo!

Hoy te digo adiós.

No es justo que siga viviendo así, pretendiendo que vivo cuando, en realidad, desfallezco a cada momento por ti.

No puedo seguir llorando, suspirando, pretendiendo llenar mis pulmones con ese aire que se vuelve tan escaso cuando no estás conmigo.

… ¡no puedo!!