martes, enero 22

Viviendo fuera de la Mátrix...


Al igual que varios autores, yo denomino Mátrix al conjunto de respuestas y reacciones aprendidas, al “cómo deben ser las cosas", trabajar de la manera apropiada, asistir a la universidad adecuada, casarte con el hombre/mujer “para ti”, en fin… cumplir con las expectativas de toooodos los demás, menos con las tuyas propias.

Otros lo llaman el Inconciente universal o Personalidades arquetípicas de Jung. En realidad, no importa cómo lo llames, basta que sepas que no eres tú, es algo completamente ajeno a ti.

Porque lo que tú eres… es una conciencia de posibilidades infrinitas. Tus elecciones son fundamentales, van marcando tu vida, forman tu huella por el sendero. Al hacer una elección, no desaparecen tus otras opciones, sólo que por el momento, es como si ya no existieran. Pero quién quita y te las encuentres más adelante, sonriéndote.

Puede que te encuentres viviendo fuera de la Mátrix. Ojalá que por mucho, mucho tiempo y que no sepas por qué extraño motivo, no cumplas con las expectativas de otros. No estudies la carrera “apropiada”, no vivas donde “corresponde”, no llenes las expectativas de nadie.

Al principio, cuando empecé a hacer eso, me sentí algo extraña, apartada del resto de la gente. Pero me resigné a ser tratada como “bicho raro”. Esto se vió ampliamente compensado al darme cuenta de que mis reacciones, emociones y sentimientos eran muchísimo más intensos que los de otras personas.

Cuando logras moverte fuera de la Mátrix… el universo cobra un brillo refulgente, sigues los dictados de tu corazón, los sentimientos cobran nueva vida, los experimentas de manera gloriosa, la alegría se convierte en gozo, el amor y la pasión, en verdaderos y surgen de tu interior.

A veces, me sorprendo teniendo pensamientos derrotistas. Son tan convincentes que parecerían ser míos. Pero no lo son, son de la Mátrix, y es fácil reconocerlos: son oscuros, afectan tu vitalidad.
Tus pensamientos son claros, de luz. Provocan tu sincera alegría, casi rayando en el gozo. Si lo que pasa por tu pensamiento no es así, por favor, no lo tomes como tuyo. Tú no eres la mátrix.

Eres una conciencia ilimitada, de posibilidades infinitas… ¡Amas!