lunes, enero 28

Dimensiones...


¿Te has preguntado qué son las dimensiones?… ¿Qué significa realmente que nos estemos encaminando a un cambio de dimensión?

Muchos son los que opinan (yo entre ellos… jeje…) que la Época del Gran Cambio o el Tiempo del No Tiempo que pronosticaron los mayas para el 2012 es justamente eso… vamos a cambiar de dimensión, aunque en mi opinión (o deseo desde lo más profundo de mi alma) veremos algo que no tiene antecedentes: la fusión de dimensiones: la tercera con la cuarta y quinta… trayéndonos un futuro de infinitas posibilidades.

Esto no es algo que vaya a suceder de un día para otro... ya está sucediendo. ¡Y todavía nos queda tanto por aprender!

Las dimensiones son los diferentes estados de la existencia que experimentamos durante el camino hacia el Ser Único. Es decir, son los pasos evolutivos que el Ser decidió experimentar para regresar a la fuente divina, a la Unidad.
Todos los niveles dimensionales se encuentran en el aquí y el ahora, la diferencia es la longitud de onda o frecuencia. Las dimensiones son frecuencias dentro de las que vibramos, también podriamos decir que son niveles de consciencia, y es útil la analogía con las bandas de radio, con sus frecuencias y estaciones: puedes recibir una estación si la sintonizas.
Cambiar de dimension significa expandir nuestra conciencia. Es famosa la historia del personaje animado que vivía en un papel y cuyo mundo era totalmente bidimensional o plano, y su cerebro había aprendido que su realidad estaba formada por puntos y líneas sobre un inmenso plano blanco. Era inconcebible para él pensar en objetos con volumen o tridimensionales.

Así es para nosotros un imposible, desde nuestras creencias, pensar en realidades que no sean la conocida, ya que nuestro cerebro está entrenado a percibir de una manera determinada. Cambiar de dimensión es expandir nuestra forma de percibir la realidad, de ver las cosas. Ahora nos encontramos pasando a una realidad más energética, que se parece más al mundo de los sueños y la imaginación.
Para entender ésto un poco mejor, permítme contarte algunas cosas sobre estas dimensiones:

La primera dimensión es la encargada de convertir a la energía en materia, es la frecuencia básica de los átomos y las moléculas. Se puede decir que maneja un nivel de consciencia elemental referido al cumplimiento de funciones, o sea una consciencia puntual, sabe como dirigirse de un punto a otro. Los minerales y el agua vibran en esta frecuencia.

La segunda dimensión es la frecuencia donde existen la mayoría de los animales y las plantas. Es también física e impulsa la identidad biológica. Es la vibración que mantiene la unión entre las especies.

La tercera dimensión es donde existimos los seres humanos, también es física y el tipo de conciencia de esta vibración es volumétrica o tridimensional. Hay una percepción lineal del tiempo y el espacio, con la capacidad de recordar el pasado, proyectar el futuro estando en el presente. Se basa en la polaridad y la ilusión de separación, en el desarrollo de la identidad individual y la pérdida del sentido grupal.
Esta es la frecuencia donde nos hacemos conscientes de nosotros mismos, desarrollamos el ego y creemos que estamos separados del todo. Es en esta dimensión donde nos percibimos más separados del todo que en ninguna otra, por lo tanto es aquí donde al Ser Único se le presentan más retos de integración y crecimiento.

La cuarta dimensión es la frecuencia donde regresamos a la conciencia de integración grupal, sin pérdida de la individualidad. Es el lugar donde residen los sentimientos, las emociones y los sueños.
En esta dimensión percibimos el tiempo en oleadas cíclicas o en forma de espiral. Existe en un campo cuántico donde se presentan simultáneamente todas las alternativas y posibilidades. Es la frecuencia de la sincronicidad, la empatía y la telepatía. Es la última dimensión donde experimentamos con el cuerpo físico como vehículo de aprendizaje.
En esta frecuencia percibimos la multidimensionalidad y nos damos cuenta de nuestra responsabilidad, al hacemos consciente que cada una de nuestras acciones afecta el todo.

En estos momentos, algunos de nosotros estamos despertando a la conciencia de cuarta dimensión y la sentimos sobrepuesta sobre la tercera, por eso a nivel humano estamos pasando por la necesidad de compartir con grupos, revisar nuestras relaciones, buscar sanación y crecimiento.
También es la causa del desmoronamiento de estructuras económicas y políticas por mucho tiempo establecidas, que ya no se corresponden con esta nueva vibración.
Y cada vez vamos a ver más cambios a todos los niveles de aquello que no se corresponda con la nueva energía.
El cambio dimensional es a todas las escalas, no solo lo estamos experimentando los seres humanos sino también la Madre Tierra y a una escala mayor toda la galaxia. No sucede de un día para otro sino por capas paulatinas de conciencia.
Una vez que estemos alertas en la cuarta dimensión se abrirán suavemente las puertas a quinta y sexta. Aceptar la consciencia de cuarta dimensión es lo que se ha llamado el salto cuántico y es el paso más difícil del cambio dimensional ya que este implica un profundo cambio de creencias. La cuarta dimensión es el portal hacia la consciencia Crística, aquella conciencia colectiva que se reconoce a sí misma como Unidad.

El sistema de creencias que sostiene la 3D está basado en el concepto de separación, del tiempo lineal, de la fragmentación de la conciencia y de la realidad ilusoria, estas creencias han sido necesarias hasta ahora para la evolución humana. Pero como ya nos encontramos en transición hacia la 4D, estamos experimentando un proceso de integración que se manifiesta en forma cíclica.
Cuando nos referimos a pasar es simplemente al hecho de hacer consciente esa otra densidad con su nuevo sistema de percibir y ver la cosas, porque en realidad no hay que ir a ningún lado, ya que todo está en el presente, en el aquí y el ahora.

El despertar a 4D por lo tanto no es algo que se da de forma inmediata, es un proceso paulatino que se superpone. Habrá momentos en los cuales funcionemos con la conjunción de estos dos sistemas y otras donde prevalezca uno o el otro.
En estos momentos a pesar de que la Tierra ya ha cambiado de frecuencia, nuestra conciencia no está sincronizada todavía con la nueva energía... Este es un proceso delicado, cuando la frecuencia terrestre y la de la conciencia humana no están en sincronía se produce una fricción temporaria, que de alguna manera explica los cambios bruscos que estamos viviendo a nivel global. Sin embargo, es solamente cuestión de tiempo, ya que el cambio está programado genéticamente y la memoria celular conectada a la conciencia, está a la espera.

Mucho se ha hablado de los síntomas físicos que acompañan esta transformación y de las más variadas alteraciones que desafían los diagnósticos médicos.
Lo cierto es que cada quien escoge según sus creencias lo que le toca vivir. Mientras más resistencia opongamos y ocultemos nuestra sombra, así proporcionalmente será nuestra dificultad de adaptación a las nuevas frecuencias vibratorias.

Una gran cantidad de energía lumínica entrando a nuestra atmósfera, explosiones solares intensas, cambios muy profundos en los ejes solares afectando nuestra magnetósfera, son las causas de estos cambios en nuestro cuerpo físico, que tienden a producir la transmutación necesaria para adaptarnos a esas nuevas energías.
Algunos de los síntomas más comunes que nos indican que estamos cambiando nuestra estructura física y genética son:

1. Dolores de cabeza
2. Dolores erráticos en las articulaciones
3. Cambios en el sistema endocrino y el nervioso
4. Cambios en los hábitos alimenticios
5. Sensaciones de flujo de energía en el cuerpo
6. Palpitaciones y taquicardias.
7. Amplificación de los sentidos
8. Pérdida de memoria
9. Sensación de desorientación
10. Cambios en la percepción del tiempo
11. Experiencias fuera del cuerpo
12. Sueños vívidos

Podríamos enumerar muchos más, es uno de los temas mas interesantes y que nos esta enseñando a cambiar nuestras creencias sobre la enfermedad y a retomar nuestro poder sobre el cuerpo físico, muchas veces entregado a los otros por miedo e ignorancia.
Este grupo de síntomas finalmente sirven para recordarnos que estamos viviendo una transmutación para poder existir en una dimensión aunque física, menos densa.

Señales de que estamos en 4d: Hoy en día nos encontramos realmente con un pie en tercera y otro en cuarta. Pero ¿cuales son las señales que nos dicen que estamos acercándonos a esa transformación?

Una de las señales es el darnos cuenta de la sincronicidad. En realidad todo sucede en el presente y todo es sincrónico, pero existen ciertos eventos más resaltantes que son como el timbre del despertador, que nos permiten el realizar conexiones entre las cosas.
Por ejemplo, cuando pensamos en alguien y esta persona nos llama por teléfono o aparece de visita inesperadamente. O deseamos comer cierto tipo de comida y llega un amigo y nos invita a comer justamente lo que estábamos deseando.
Anteriormente hablábamos de sueños vívidos y experiencias fuera del cuerpo, estos también son señales, unidos a las experiencias de bilocación, es decir la conciencia de encontrarnos en dos sitios simultáneamente o de omnilocación, cuando nos sentimos tan expandidos que percibimos que estamos en muchas partes a la vez.

Cambio en la percepción del tiempo, es el sentir una fluidez distinta, lo que llamamos tiempo fluido o circular, no lineal.
Otra de las señales es que sintamos la necesidad de reunirnos con personas afines a nuestro sentir, buscar sanarnos emocionalmente, hacer terapia o interesarnos por libros de temas espirituales, algo que antes nunca nos hubiéramos planteado, esto es parte de la energía de unión propia de la conciencia crística.

La búsqueda interna y la exploración de nuestra razón de ser, el conocer cuál es nuestro propósito también es señal de que estamos viviendo el cambio.
Hay muchas otras señales que nos anuncian el cambio a 4D, pero se podría decir que la señal mas importante es nuestro cambio de percepción de la realidad con la conciencia de que no hay diferencia entre adentro y afuera...