martes, marzo 20

Mi añoranza...


De tanto en tanto la luz de tu imagen se resbala por mis dedos, al igual que el cristal de tu sonrisa, el arrullo de tu voz ... desaparecen.

Y el vacío que queda en su lugar, me golpea como lo inexistente, inalcanzable.

Se ausentan los sonidos, la música, hasta las palabras.

Y si antes me costaba trabajo encontrar una razón para todo esto, ahora se ha vuelto imposible hallarle sentido ...

¿Cómo explicarme que tu voz ya no me acompaña continuamente como otrora, que tus palabras ya no me escoltan, ni tu mano me guía?

Cosas que siempre di por sentado, me pertenecían ... ya no existen.

Muchos años ... muchas vidas ... mi añoranza de ti crece a cada instante ...