Déjate llevar...

Me has escuchado muchas veces decirte: ¡déjate llevar! Y, probablemente, no sepas muy bien a qué me refiero … jaja …

Verás, yo siento que, ante una situación determinada … aparecen dos “voces” o actitudes en nosotros ... una mente parlanchina que te explica cómo no debes, no puedes o no está bien y una intuición serena que te impulsa a hacerlo, aunque no sepas exactamente qué, por qué o cómo saldrá.

Cuando te digo … déjate llevar … me refiero que le hagas caso a esa intuición que te impulsa.

¿Por qué me atrevo a aconsejarte eso? … Me tomó muchos años entenderlo y usarlo … no quiero que te suceda lo mismo, ¡quisiera que comenzaras a disfrutar de esta maravilla a partir de ya! … jaja …

Es que, cuando fluimos con nuestra intuición, nos movemos más allá del pensamiento y entramos al sentimiento. Esa intuición, eso que sabes, es a lo que me refiero con que escuches a tu corazón … él te habla a través de tu intuición, y es muy travieso … jaja … suele molestarse muy poco con explicarte qué onda, así que … sólo tienes que hacer lo que sientes que debes hacer.

No importa si te han adoctrinado para que creas que eso no es correcto. El corazón nunca se equivoca. Lo único que puede hacer es amar, y el amor NUNCA es incorrecto ni está equivocado.

Cuando te dejas llevar … la vida deja de ser una experiencia terrible y se convierte en … una aventura continua.

… jaja …

¡Hazme caso! … ¡déjate llevar!