sábado, octubre 28

Aprende ...


No todas tus relaciones tienen el mismo peso, no todas son parecidas. Aprende a diferenciarlas, es esencial para que puedas obtener lo mejor de tu aprendizaje.

¿Te ha pasado que tienes un amigo con el que no necesitas muchas palabras para entenderse, que pareciera adivinar tu pensamiento a cada paso, o tú el de él? ¿Que te proporciona un enriquecimiento casi mágico, no tanto por lo que te dice, sino por lo que te permite descubrir de ti cuando estás con él?

Seguramente ese amigo es un alma compañera, alguien con quien han decidido caminar juntos, a través del tiempo, para comprender mejor las lecciones de vida.

Pero hay otro tipo de relaciones: las kármicas. Probablemente esas personas no fueron elegidas por ti, llegaron a tu vida como portadoras de la lección que tienes que aprender. No es que sean tus maestros, sino que su comportamiento y el cómo sobreponerte a ello es lo que te va a enriquecer, permitiendo que avances un paso firme en el camino.

No trates de evitar estas lecciones.

Vívelas intensamente … ¡aprende de ellas!!