martes, junio 6

Reconocerte ...

Si los rumores que llegan de voces lejanas, son ciertos. Si los susurros que proclama mi corazón, son acertados. Y tú existes … ¿cómo reconocerte? … Tus ojos no serán los mismos, tampoco tu estampa.

He pasado semanas preguntándomelo … ¿Cómo reconocerte?

Y sólo ahora que he abierto mi alma a la premonición de tu llegada, puedo saber cómo aceptarte. Sabré que has llegado si

… puedo reflejarme en tu mirar

… noto la sonrisa compartida o tan sólo un parpadeo significativo

… surges a mi paso cuando voy saliendo

… encuentro tus ojos fijos en mí cuando te busco.

… aludes innecesariamente a quien hoy comparte tus juegos, y te hace pretender ser feliz por desesperado.

… alguien que no conozco menciona que le has hablado mucho de mí

… pronuncias mis palabras en tu conversación

… mi cercanía hace que vuelvas a crear.

… comienzas a vislumbrar tus respuestas

… tu risa brilla en mis tormentas

… cambias tu talismán, pues te rozan nuevos aires

… me cuentas cosas de tu vida que nunca has querido compartir con nadie

… mi ternura te habla de un buen amor

… nos mantenemos enlazados a través de nuestras sentidos, por más ensimismados que estemos.

… llegas a mí paulatinamente, como señal de luz.

… una sonrisa me anuncia que no estoy enferma, que debo sanar un alma.

… el láser de tus ojos penetra mi corazón, sacudiéndome

… mi voz permea todo tu ser

… compartimos el gusto de encontrarnos en esta ruta sin fin

… haces lo que con nadie y te acercas a mi cuando todavía no te reconozco

… el compartir no está marcado por lágrimas sino sonrisas

… puedes descubrirme, absorta como tú

… atisbo tu mirada cómplice en medio de la multitud

… abarco tu sentimiento de igual manera que tú abrazas el mío

Si alguno o todos suceden …
sabré que has llegado …
reconocerás que sí existo …
ya no seremos opacos