lunes, junio 5

Llegas tarde ...


¿Qué podría decirte si llegas a mí ahora?

¿Si ese amor que tanto invoqué en mis mensajes fuera real y tú lo confieres?

¿Si me vieras y te viera y nos reconociéramos?

De inmediato o lentamente, no tiene importancia. Pero nos recordáramos, sabiendo que cada uno significa para el otro todo lo que soñamos, inventamos y extrañamos.

¿Podría acercarme a tí y reprimir mis ganas de acariciarte el rostro como lo he hecho por siglos? ¿Podrías contener las tuyas de golpearme con un beso?

¿O el espanto de encontrarnos tan a destiempo nos provocaría ganas de huir, de pensar que todo fue sólo sueño o pesadilla, que nunca apareciste, nunca has existido?

Quisiera coincidir contigo, convertirme en tu sombra, mirarte a los ojos y decirte bienvenido.

Pero llegas tarde a mi vida ...