Un respiro ...

Ya necesitábamos un respiro, aunque fuera pequeño, a todas las metidas de pata que hemos tenido en este país, en los últimos meses, en el área de relaciones exteriores.

Al menos, por ahora es un "triunfo a medias", un “casi bien”

El encabezado del periódico reza:

El Sheraton no pasó inspección; será clausurado.

Y para todos aquellos que no viven en México, les explico que el hotel que van a clausurar es el de la foto, el María Isabel Sheraton, que está frente al Ángel de la Independencia, ambos todo un hito en la ciudad de México.

Van a clausurarlo por el motivo que no es ... pues ...

¡¡Uyyyyyy!! ¡Otra vez escribiendo cosas que no todos mis amigos pueden entender! Sorry ...

Les explico brevemente: La semana pasada una compañía petrolera gringa contrató el hotel para mantener una serie de reuniones con funcionarios cubanos. Cuando el Departamento del Tesoro de USA se enteró, telefoneó de inmediato al Sheraton, requiriendo que expulsaran a los funcionarios cubanos. ¡Cosa que hicieron! Bajo la excusa de aplicar una ley gringa que dice que las compañías gringas ni sus subsidiarias pueden realizar negocios con cubanos. (Nótese que al menos los medios no mencionaron nada de que a la petrolera gringa siquiera se le hubiera llamado la atención, lo cual podría haber sido el objetivo correcto, pero después de todo … los gobiernos no suelen manejar los objetivos correctos, ¡sólo los equivocados!)

¡Ya se imaginarán la que se armó! El pueblo mexicano se sintió completamente abusado por los gringos, básicamente por la extraterritorialidad de la aplicación en México de sus leyes y por la discriminación (sin mencionar la celeridad que se le dió a la acción, ya quisiéramos gozar de tal rapidez para algunos asuntos por aquí).

Ya pasó una semana de esto y, mientras el aparato burocrático del gobierno federal continúa estudiando la posibilidad de mandar una queja a USA y la aplicación de sanciones a la cadena gringa dueña del hotel … etc … etc … etc!! … la delegación (la parte del gobierno de la ciudad de México que, entre otras cosas, concede los permisos de operación de los negocios) sí se movió rápidamente, encontró motivos dentro de su ámbito para clausurar el hotel (tenían sólo la tercera parte de cajones de estacionamiento que requerían y no contaban con licencia para la operación de dos de sus bares, entre otras menudencias) y … ¡¡¡los clausuró!!!!

Por eso digo que estuvo bien hecho, aunque haya sido por las razones incorrectas, pues la Delegación no se puede meter en política mayor, pero … ¡puede hacer lo que hizo!

¡Espero que el gobierno federal haga lo que debe hacer!