sábado, enero 28

Me tenías preocupada ...


Me tenías preocupada ... tanto silencio ...

y reapareces con dolor, indescriptible, porque observar lo que escribías ...

... lo que leía en tu blog era tan triste ... y luego, más silencio.

Pero hoy ya puedo sonreír porque ese amigo que había caído por las dunas del desierto, vuelve a empezar ... se lo ve a la distancia comenzando a escalar nuevamente, sacudiéndose la arena de los ojos, de su ropa, caminando otra vez, chance sin rumbo fijo, pero respira sin problemas ... ¡puede oler!

... por ahora, sólo la arena. Pero pronto el aroma de las rosas ... cuando llegue al primer oasis.

¡¡¡Y hasta cree de nuevo en la magia!!!

Esa magia que ha contagiado a tanta gente ... y que ahora puede nuevamente comunicarnos.

... porque el mundo estaba muy triste sin el hechizo de sus palabras, a las que sólo él puede imprimir los pases mágicos que hacen que lleguen profundamente al corazón.

... Gracias ...